La chinchilla
Las chinchillas salvajes viven en zonas de alta montaña de los Andes entre las grietas de las rocas.
Si sigues nuestro blog, recordarás que hace unos días hablamos del degú. Un pequeño roedor chileno que fue descrito por primera vez por el padre jesuita Molina hace ahora unos 230 años. Pues bien, la chinchilla es otro roedor que también llamó la atención de este religioso que la denominó ratón lanudo. Actualmente la conocemos por Chinchilla lanígera o chinchilla de cola larga.
Lo que más impactó a Molina fue su docilidad, sentido de la limpieza, carencia de olor corporal y la belleza de su sedoso pelo largo. Al conocerse en Europa la existencia de este pelo tan suave, provocó que este pequeño animal comenzara a cazarse en masa como animal peletero, llegando a extinguir a su prima la chinchilla real y dejando una pequeña población de chinchilla de cola corta.
Por suerte, en 1923, Mathias F. Champan, consiguió la autorización para exportar a California once Chinchilla lanígera y con ellas se comenzó la cría comercial de estos animales, evitando así la caza de las chinchillas silvestres, aunque ya se habían implantado planes de protección por los gobiernos de Perú, Chile, Bolivia y Argentina en 1910. Todas las chinchillas domesticas que existen, tanto las de uso peletero como las de compañía, provienen de esta pequeña familia.
Al igual que sucede con otros animales domésticos, la selección de ejemplares para cría ha permitido que se desarrollen características que en vida salvaje no hubieran surgido. En el caso de las chinchillas, no podemos hablar de razas, como en los perros, gatos, vacas, ovejas, etc. , pero sí que han aparecido una gran variedad de colores. La chinchilla salvaje es gris con el vientre blanco, sin embargo, en las tiendas de mascotas podemos encontrar chinchillas black velvet (lomo negro y vientre blanco), ebony (negras completamente), blancas, mosaico (blancas y grises), violetas, marrones, beige…
Las chinchillas salvajes viven en zonas de alta montaña de los Andes entre las grietas de las rocas, están acostumbradas a saltar, no forman colonias y son herbívoras estrictas. Esto significa que si tenemos una chinchilla como mascota deberemos tener en cuenta estos aspectos para mantenerla sana y feliz.
La jaula de las chinchillas debe ser todo lo grande que nos podamos permitir, y además es imprescindible que tenga baldas a las que pueda saltar y esté protegida de las corrientes de aire. Si además de una jaula grande podemos sacarlas todos los días un ratito, lo agradecerá enormemente, ya que son animales muy activos, especialmente por la noche. Aunque en la vida salvaje no vivan en grupo, si tenemos una jaula lo suficientemente grande, podemos alojar una pareja o incluso un pequeño grupo de chinchillas sin mayor problema. Pero antes de juntarlos, tendremos que hacer una adaptación del nuevo animal, ya que estos graciosos roedores, pueden llegar a ser bastante agresivos con miembros de su especie. Sin embargo, son muy sociables con las personas y es fácil que se si sueltas una chinchilla en la habitación se acabe subiendo encima del dueño a mordisquearle suavemente los dedos y a hacer ruiditos para demostrar su afecto.
La base de la alimentación de la chinchilla es el heno, ya que como roedor que es necesita desgastar constantemente sus dientes, pero también tendremos que aportarle un puñadito diario de pienso especial para chinchillas para que crezca fuerte y sana. Respecto al cuidado del pelo, no se deben bañar con agua, en su lugar se le debe proporcionar arena volcánica que elimina la humedad de su pelo dejándolo limpio y suelto.
Es habitual que los roedores tengan camadas muy numerosas de crías poco desarrolladas cada poco tiempo. Sin embargo, al contrario que en otros roedores, la reproducción de las chinchillas no suele ser problemática en los hogares ya que la gestación de las chinchillas dura 111 días, por lo que no pueden tener más que 3 camadas al año como máximo. Además tienen una media de 2 crías por camada y nacen completamente formadas. El único cuidado a tener en este aspecto es que algunos colores de chinchillas no pueden cruzarse entre ellos porque portan un gen letal que provoca la muerte de los fetos con determinada dotación cromosómica, con el riesgo que esto conlleva para la madre.
Por último, cabe decir, que los dientes son el punto débil de este roedor, por lo que es imprescindible seguir una dieta correcta y revisarlos cada cierto tiempo, ya que unos dientes excesivamente largos pueden provocarle fuertes dolores que le impidan comer y le llevan a la desnutrición y la muerte. La media de edad de estos animales suele rondar los 8 o 10 años, pero algunos ejemplares han llegado a vivir ¡hasta 20 años!
12 respuestas a La chinchilla
Hola tengo una chinchilla y la llevé al veterinario recientemente me dijeron que todo estaba bien únicamente que revisara su muda de pelo y que le cambie paulatinamente la alimentación y eso estuve haciendo desde hace dos días pero desde ayer he notado que su orina cambió de amarillo a marrón oscuro y quería saber si eso era normal
RESPONDERHolaa quisiera saber cuales son los colores que no pueden cruzarse por el riesgo que puede tener la madre y los fetos??
RESPONDERHola, tengo una duda, una de mis chinchillas es mas pequeña que la otra, porque puede ser eso?, o porque razón pasa eso?
RESPONDERTengo una chinchilla de 8 años. Su pelo esta distinto ,cómo despeinado,erizado. Que puede ser?
RESPONDEREstoy haciendo un trabajo de clase y que quería saber qué ocurre si las Chinchillas desaparecen?
RESPONDERBuenos días. Mí nombre es Maximiliano y quisiera averiguar dónde puedo conseguir en España está especie?
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